Poniendo en valor…

© Christie’s 2012

Esta pieza, regalada por la «‘LA M.N.Y.L.L. CIUDAD DE VITORIA» en agradecimiento al general Alava, entre otras cosas por evitar el saqueo de Vitoria por parte de nuestros aliados británicos en 1813, y posteriormente regalada a su vez a el primer Lord Raglan (uno de esos militares del XIX que dan nombre a ropa, o postres), será subastada el 4 de Abril por Christie’s, que estima su valor en £30,000 – £50,000 .

Como era de esperar, se ha propuesto que nuestras instituciones se aseguren de la vuelta a nuestra provincia de tan histórica pieza. Un detalle, precisamente, tiene que ver con el lugar donde, por lógica se exhibiría la espada. En Álava tenemos un museo perfecto para exhibirla, puesto que precisamente es un Museo de Armería, donde además de armas en general, hay unos cuantos trofeos y reliquias variados de la batalla de 1813. Ignoro cuántos ciudadanos o políticos que quieren ver esa espada en el museo lo han visitado recientemente,  diría que no han sido muchos…

Museo en el que en breve se tiene previsto cobrar, por primera vez, entrada. Lo que resulta chocante son los argumentos esgrimidos por algunos políticos al respecto, como que pese a la disminución de ingresos forales por la crisis, esta medida «no tiene afán recaudatorio». Si quieren dejar claro que esto es cierto, por lógica el dinero no se podría destinar a paliar los recortes presupuestarios del Servicio de Museos ( el Departamento de Cultura ha sufrido un 30%, el doble de la media de los de Diputación), ni debería engrosar el «ingresos varios» de la Diputación. Por ejemplo, comprar esta histórica espada con la recaudación de los  museos sería consecuente, y un aliciente para que aquellos que ahora tendremos que pagar por visitar los museos alaveses, lo hagamos más a gusto.

De todas maneras, opino que antes de pensar en gastar ese dinero en incrementar aún más el rico patrimonio alavés, se debería tener en cuenta que quizás también hay que poner en valor lo que ya tenemos, especialmente si nos centramos en aquello relacionado con el bicentenario está al caer el año que viene:

-Un museo de Armería, que si bien anda sobrado de cantidad y calidad de fondos, tiene carencias, a veces graves, en otros aspectos.

-Un campo de batalla que no está señalizado de ninguna manera, y que tampoco es fácil visitar por los polígonos industriales, carreteras (N1), etc que se han hecho en él.

– Un monumento a la misma, en la plaza más importante de la ciudad, que está siendo vandalizado y destrozado desde hace años ante la pasividad de las instituciones responsables…

«Poner en valor» requiere algo más que un desembolso puntual, o ponerse a cobrar entrada. Sobre todo, trabajo y ganas, porque patrimonio no nos falta.

Y ya que he hablado de museos, no querría olvidarme del de Heráldica, como parece que sí lo hace la web institucional. Situado en Mendoza (de donde, evidentemente proviene el apellido),  parece haber caído víctima de la crisis, pero de una manera más silenciosa que otros . Se cerró en el 2007, se anunciaron obras y un traslado:

Cartel de obras que todavía está puesto en la puerta (cerrada) del museo. El escudo foral es el el viejo, hace 5 años que se cambió a una cosa más moderna. Evidentemente, llevan otro ritmo diferente al de otro monumento alavés famoso por estar «abierto por obras», y también el traslado se hace esperar, a juzgar por lo que se ver por las rendijas d ela puerta y las saeteras:

Hace ya unos años le dediqué una entrada, pero aparte de estas fotos, que hice el año pasado, no ha habido ninguna novedad…

Para el que quiera ver más fotos de esta torre, puede hacerlo en mi galería de flickr.

Tres años sin Museo de Heráldica Alavesa

Foto de Gari Ver licencia

En marzo de 2007, y por cuestiones de accesibilidad y habitabilidad (las torres medievales no tiene rampas ni calefacción) fue cerrado uno de los museos más especiales de nuestra provincia. El museo de Heráldica Alavesa, cuyo cometido consiste en salvaguardar los escudos señoriales que antaño decoraban las fachadas de casas, palacios y otros edificios alaveses, comunicando en su lenguaje la propiedad o patronazgo de linajes.

Fuente Wikicommons

Su traslado a la iglesia de Villanañe, situada junto a la torre de los Varona, fue anunciada hace ya dos años, pero no hay ninguna confirmación de que dicho traslado haya tan siquiera comenzado. Mientras tanto, persiste la duda de qué uso puede dedicarse la torre de Mendoza, solar originario de un apelido extendido primero en la reconquista y luego en la conquista de América, mucho más allá de la humilde villa que les dio nombre. También es el caso de la torre de Martioda,  adquirida por la Diputación Alavesa y que al contrario que la torre de Mendoza no sufrió una brutal restauración el los años 60 con criterios que hoy serían inadmisibles, sino que está en proceso de ruina, o del palacio de los Guevara, también restaurado en los 60 pero que jamás ha tenido ningún uso.

Fuente

Y también recientemente, las dominicas que habitaban el palacio de Quejana, imponente conjunto medieval que fue la residencia del Canciller Ayala entre muchos de su apellido, como Fernán Pérez de Ayala,  su padre,  han debido trasladarse a otro convento por su escaso número y avanzada edad, lo que unido a las características de un edificio de tal antigüedad, les hacía imposible continuar habitando allí. Las voluntades de los dos Ayala nombrados se incumplen, pues, tras más de 500 años de uso conventual para honrar el panteón familiar no habrá ya más religiosas en Quejana.

Noticias relacionadas:

22 de los 126 palacios y torres de Álava catalogados están en ruinas o en desuso