Esperando en el campo de batalla.
Foto de Miguel Angel García García
Ha sido más de una semana entre el viaje y los días del evento. Pero han merecido la pena, y no sólo por el estar allí, o las conmemoraciones, o las visitas de camino (Rocroi, Orleans, Normandía y Bayeux) sino por la escala y experiencia que ha supuesto. Ya hay miles de fotos, cientos de vídeos, de los que apenas veré una pequeña parte. De momento, esta pequeña entrada tendrá que valer.
No quiero olvidar la hospitalidad y el esfuerzo que nos han dedicado nuestros anfitriones locales, de la Asociación Napoleónica Belgo-Holandesa (o como se pueda traducir), y a los otros grupos que colaboraron y combatieron junto a nosotros (Reales Guardias Españolas, Voluntarios de León y Sociedad Victoriana Augusta) como Nassauers, por el rey Guillermo.